Informe pericial por acciones del Banco Popular

Creo que es necesario introducirla haciendo un resumen de lo ocurrido con todo este asunto.

El 26 de mayo de 2016 el Banco Popular anunció una ampliación de capital de 2.500 millones de euros, precisamente el mismo importe por el que a finales de 2012 también realizó otra ampliación de capital. Esto lo hizo para sanear sus cuentas, motivándolo en la gran dependencia que tenía el banco del ladrillo y por la necesidad del aprovisionamiento de liquidez que debía realizar por todo el asunto de las ‘cláusulas suelo’.

Siguiendo con el trámite de esta ampliación de capital, que no es más que la emisión y venta de nuevas acciones para precisamente con el dinero que los nuevos inversores abonen por esas acciones conseguir tener liquidez, se registró en la comisión nacional del mercado de valores el correspondiente folleto de emisión.

Después de esto, apenas unas semanas después, el 17 de junio del 2016, el banco popular anunciaba que la emisión y la venta de acciones había sido un auténtico éxito.

Sin embargo, el 3 de febrero de 2017 ya no se podía esconder más la verdadera situación y el propio Banco Popular tiene que reconocer unas pérdidas de 3.485 millones de euros, lo que llevó a la salida del presidente del banco y a que el 7 de junio del 2017 nos despertaremos con la noticia de que el Banco Popular se vendía al Santander por un simple euro.

Todo esto supone que, mientras a finales de 2016 el Banco Popular presumía de ser uno de los principales bancos del país, a mediados de 2017 se vende por menos de lo que cuesta una caña de cerveza: Esto significó que todos los accionistas que habían participado en la ampliación del capital un año antes vieron como sus acciones no valían absolutamente nada.

Ante esta situación lo primero que extraña es como puede haber un cambio tan drástico en tan poco tiempo. La explicación es muy sencilla, ya que a día de hoy sabemos que la situación económica que nos vendieron cuando se anunció la ampliación de capital, incluso desde las cuentas anuales del 2015 era simplemente irreal, falsa, es más, en octubre del 201,8 la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores) inició un expediente sancionador frente al Banco Popular por haber suministrado a este organismo información financiera con datos no veraces.

Por tanto, si la propia CNMV no era conocedora de la realidad, tanto que no hizo nada está más de dos años después, es evidente que los que compraron esas acciones tampoco podían conocer la realidad, por eso este es el principal motivo por el que los afectados están tratando de conseguir recuperar el dinero invertido, “el error”, aunque quizás mejor sería decir “el engaño” ya que la entidad lo que hizo fue falsear su situación económica para conseguir mantener la confianza de sus futuros accionistas.

Pero ese engaño supuso que el comprador de estas acciones lo hacía sin conocer la verdadera realidad, lo que implica que lo hacía amparado en el error al que la propia actuación de la entidad le había llevado.

De esta forma son ya muchas las sentencias que se están dictando por los distintos juzgados de primera instancia que están dando la razón a estos afectados, consumidores y no consumidores, condenando en este caso al Banco Santander a pagarles las cantidades que invirtieron en la compra de estas acciones realizadas con motivo de esta última ampliación de capital.

Hay muchos aspectos más que tratar sobre esta cuestión, sin embargo, en caso quería dar una visión inicial a todo este asunto, explicar cómo se produjo esta aplicación de capital por la que los afectados aún tienen derecho a recuperar el dinero que invirtieron.

Nuestro equipo de especialistas le aportará el informe pericial necesario para que la reclamación de las cantidades que cada inversor pretende recuperar tenga las mayores garantías.

Contacta con nuestro equipo de expertos y le informaremos sin compromiso alguno.